Por Mariana del Arenal
Xavi Sala, director, guionista y productor de cine, ha realizado 9 cortometrajes que han obtenido más de ochenta premios y el reconocimiento internacional, como es el caso de su cortometraje “Hiyab”, nominado a los Premios Goya. En 2018 realizó su primer largometraje llamado “Xquipi’ Guie’dani” (El ombligo de Guie’dani), proyecto seleccionado por el Laboratorio Sundance de Oaxaca (México), ganador del Premio Cinépolis Distribución y Mención Especial a la mejor actriz en el Festival Internacional de Cine de Morelia, y Premio Radio Exterior de España a la cinta que mejor refleja la realidad iberoamericana en el Festival de Cine Iberoamericano de Huelva. En el ámbito de la docencia, ha impartido clases de guion en Latinoamérica, España y África. En México, ha impartido clases de guión y crítica cinematográfica: CCC, UNAM, UAEMex, Centro y CIBEF.
Al inicio de la entrevista, Xavi nos comparte el primer contacto que tuvo con el séptimo arte.
– Al cine llegué de forma natural, desde pequeño escribía y realizaba audiovisuales con diapositivas, de forma muy casera. Me maravillaba la espectacularidad de la sala de cine. La primera película que vi en un cine fue Blancanieves de Walt Disney.
Aunque me licencié en periodismo no soy periodista. Pensaba que para dedicarme al cine tenía que ser un erudito en la materia, pero con el tiempo entendí que no era lo mismo hacer cine (lo que había hecho desde niño) que saber de cine. Intenté estudiar cine en la Escuela de San Antonio de los Baños (Cuba) y por poco no fui seleccionado. Paradójicamente años más tarde, me llamaron para impartir clases. Tomé algún que otro curso, pero mi formación en el mundo del cine ha sido prácticamente autodidacta.
Posteriormente, Xavi comentó que es importante hablar de cine, debido a que tiene una gran capacidad de comunicar, emocionar.
– El cine tiene una capacidad inmensa para comunicar y emocionar. Nos abre la puerta a otros mundos y a otras miradas, nos genera reflexiones sobre nosotros mismos, los demás y la vida. Mi forma de ver el mundo la transmito a través del cine.
Con relación a su trabajo, Xavi nos comenta que la identidad y la pertenencia se vinculan con su propia biografía, un diálogo que se desenvuelve entre su experiencia y el cine.
– Efectivamente, casi todas mis películas (cortometrajes o largometrajes) están muy conectados temáticamente: la identidad, la pertenencia, la discriminación y la intolerancia. Son temas que me interesan y confrontan como ser humano, entre otras cosas porque me identifico mucho con ellos, desde niño he vivido o conocido situaciones muy similares a las que cuentan mis películas. En el caso de El ombligo de Guie’dani hay frases extraídas literalmente de mi infancia, la agresión contra la identidad catalana todavía perdura, al igual que la zapoteca. Me interesan los temas sociales (no necesariamente de minorías, no creo que la comunidad musulmana, catalana o zapoteca sean una minoría) que me confrontan a mi y a los espectadores, y que tienen una dimensión universal.
En cuanto a su experiencia como profesor, Xavi señala el contexto en el que se encuentran los jóvenes.
– Veo mucho entusiasmo creativo pero poca formación cinematográfica. La televisión (en especial la telenovela) y el cine comercial norteamericano influyen negativamente en los jóvenes que desean escribir guiones cinematográficos, les anula su propia mirada y les resta interés y profundidad a sus propuestas narrativas.
Finalmente, el director de cine, se dirigió a los chicos que van a tomar el curso en el Seminario de Cine Contemporáneo en CIBEF.
– Me gustaría que mostraran entusiasmo por el cine y por la vida. Les animo a que se aprovechen de mi experiencia práctica, no tanto teórica, para perderle el miedo que no el respeto al mundo del guión, todos tenemos historias interesantes que contar pero debemos aprender a contarlas de la manera más eficaz, que es con la verdad.
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